He vivido durante 20 años con 5-10kg más de lo ideal sobre mis articulaciones y metabolismo.
- Ningún médico me dijo que me sobraba peso: solía estar justo por debajo del límite considerado normal.
- Me contaba a mi mismo que era de complexión "fuerte", con piernas potentes. Mi entorno pensaba lo mismo.
- Todos justificábamos mi enorme apetito con que gastaba mucha energía mediante el ejercicio.
¿Qué me hizo ver la realidad?
- Una temporada de atracones descontrolados (hambre emocional).
- Conocer gente delgada con más fuerza que yo.
- Sentirme más funcional cada vez que temporalmente bajaba de peso.
Probé dietas varias: baja y alta en carbohidratos, baja y alta en proteína, baja y alta en grasa, sin azúcar añadido, paleolítica, cambiando fruta por verdura, mezclando mínimos ingredientes...
El ejercicio que practiqué casi siempre fue variado y diario: fuerza, cardio de varios tipos, flexibilidad, propioceptivo, correctivo...
Conclusión
Independientemente de la dieta, a largo plazo el cuerpo tiende a recuperar el peso inicial. Y por mucho ejercicio que se haga, el cuerpo acaba pidiendo:
- Descanso, mediante cansancio, enfermedad o lesiones.
- Más ingesta de comida.
El cuerpo pide con más fuerza que la que la fuerza de voluntad puede sostener.
¿Qué hice entonces?
Probar múltiples pequeñas estrategias e ir sintiendo su efecto combinado. Aquí las tienes: Adelgazar: estrategias.
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